Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2015

¿Qué nos hace daño?

No me refiero al daño físico producido por algo externo. Aunque podríamos llegar a encontrar alguna relación entre ese daño y lo externo me voy a referir al sufrimiento que sentimos ahora pero que tiene su origen en otro momento. Lo que nos hace daño no es el recuerdo negativo de algo que ya pasó, lo que nos hace daño es nuestra resistencia a cambiar ese recuerdo. Negativo o positivo es una etiqueta, un calificativo que le ponemos nosotros, nada más. Nos identificamos no solo con nuestro cuerpo físico sino con todo aquello que nos ha pasado en nuestra vida sin diferenciar si ha sido bueno o malo para nosotros, aquí entran las emociones y los pensamientos. Cualquier cambio de ese conjunto con el que nos identificamos es designado como un ataque, por lo que lo evitaremos por pura supervivencia. La paradoja es que nos aferramos más a lo que calificamos como negativo que a lo que calificamos como positivo, es como si fuese más importante tener el enemigo en casa controlado que al amigo

¿Quién sufre?

Hola Alguna vez, aunque solo fuese por probar, deberíamos hacernos esta pregunta cuando nos sentimos heridos o atacados. Esto bien merece una pequeña reflexión porque si nos sentimos heridos o atacados vamos a reaccionar de forma automática sin ser conscientes de lo que está sucediendo. Quien reacciona automáticamente es el mismo que el que sufre por que el sufrimiento es una respuesta automática que nuestro cerebro nos pone por delante ante un hecho o una palabra que en su origen nos dolió y que preferimos evitarlo en lugar de vivir la experiencia.

Alegría

Imagen
Siente la alegría Tu alma canta con sonidos inaudibles Se siente con un sentido no usado antes, la intuyes Tu casa eres tú y el aire huele a paz al sentir la alegría Tocas la piel del alma cuando sientes la alegría La alegría es movimiento, es el inicio del paso al caminar El alma ama la quietud que se mueve Su movimiento es sutil con frecuencia cero Se siente ahora, aquí, en tu casa El presente es inconsciente porque se da antes del sentir El alma habla en el presente que se hace consciente cuando sientes Permanece en movimiento y percibe su canto Escucha su melodía y pon atención en cada una de sus notas Recibe y acepta su mensaje "Todo está bien en casa" Eso, es la alegría

Desde donde miras II

Imagen
No puedo afirmar rotundamente que lo que escribo sea cierto y sea la verdad, siempre he dicho, y en esto si que me reafirmo, que lo que comparto forma parte de mi interpretación de lo que voy integrando en mi y que pudiera ser parte de la verdad. En cualquier caso es mi verdad actual, aunque esto último pueda verse modificado en otro momento porque mi comprensión sea otra, bien por matizaciones de la anterior, o bien por nuevas aportaciones que la borran.  Vaya por delante que parto de la premisa de que no sé lo que es la verdad y que me seria imposible explicarlo con palabras en el caso de que supiera algo. Venimos a este mundo a jugar desde la experimentación, a conocernos y a saber de nosotros. Venimos de un Todo y para poder saber de nosotros nos tenemos que separar. Solo algo separado puede saber de si mismo y, para ello, no solo necesito separarse sino que haya otros que hagan de espejo para poder verse. Para facilitar el juego reseteamos las memorias para que sea un inicio n

Desde donde miras

La otra noche acostado en la cama dejé la mente en blanco con la intención de percibir. Esto lo hago muchas noches pero no siempre soy consciente de percibir algo, pero esta vez sí lo fui. El mensaje venía a decir que miramos la vida de manera equivocada, la vida hay que verla desde dentro . Sé que me puse a desarrollar la idea intentando entenderla y creo que quedé satisfecho de lo que surgió. Al día siguiente no recordaba nada, así que he pedido recordar algo y esto es lo que va apareciendo palabra por palabra: Cada persona mira la vida tal como la entiende, con unos ojos o con otros, pero siempre la mira desde el mismo lugar. Este lugar es la frontera entre lo que cree que es y lo que no, lo que está dentro y lo que está fuera de nosotros. Tendemos siempre a mirar hacía afuera desde nuestra "superficie", como si miráramos desde la puerta de nuestra casa hacia la calle, es decir, vestidos, desayunados, con las llaves de casa y del coche, algo de dinero, el móvil y todo