El Camino


Lo siento por los que creen que hay un camino a seguir en esta vida. Yo también lo creía así. Pensaba que cuando las cosas no salían bien o no llegaba donde quería era por que me había desviado del camino verdadero. Pues bien la experiencia me lleva a integrar en mí una visión nueva del camino que ahora os comparto.

El camino no está escrito ni previsto, lo vamos construyendo con cada decisión. Podemos mirar hacia atrás y ver donde hemos estado en cada momento pero hacia delante solo existen nuestras proyecciones mentales pero no hay nada, o está todo, según como lo mires. 

Somos libres de elegir en cada momento cual es nuestro lugar. Ese espacio será un nuevo punto en tu camino. Imagina un tablero con un recorrido casilla a casilla hasta un punto final, pues en tu camino no hay casilla siguiente ni punto final, solo están las casillas por las que has ido pasando. La próxima casilla la creas tú en este momento. 

Hablar de que nos equivocamos y que podemos volver al camino no tiene demasiado sentido por que nunca vuelves a pasar dos veces por el mismo punto del camino. La casilla donde te encuentras ahora no existía antes y la siguiente aunque pueda parecerse a otras ya transitadas tampoco, y de la misma manera no existirán en el futuro. Es el recuerdo de las casillas anteriores lo que nos da idea de un camino recorrido pero, en realidad, no hay camino. El camino es la meta.

No hay errores ni equivocaciones, el camino representa el conjunto de experiencias vividas. La idea de camino crece con más experiencias. Un decisión crea una experiencia. 
El recuerdo del camino nos informa de cómo vivimos la Vida y nos sirve de base para vivir este momento y para decidir y crear otra casilla más. 

Relacionándolo con el post anterior la Caja es la ficha con la que jugamos la partida de la Vida.

Mi aprendizaje en esta ocasión es que la Vida se reduce a este momento. No hay que recorrer ningún camino solo se vive este instante y la decisión que tome de como vivirlo estará influenciada por mi Caja. La meta es ahora. Si llegas el primero disfruta de la victoria, si llegas el último disfruta de la derrota. Solo tú decides si lo consideras una victoria o una derrota.

Un detalle, la Caja cambia con cada decisión, porque la Caja varía con los recuerdos. La Caja se construye, destruye y/o transforma con cada nuevo recuerdo  Somos una ficha nueva que se sitúa en una casilla que estamos creando en este momento. 

¿No es bonito pensar que cada momento es nuevo y que tú también eres nuevo en ese momento? 
Da un poco de vértigo pero te gusta la idea ¿verdad?

Pues chic@s eso es la Vida. 

Como dice Sergi Torres: "No hemos venido a comprender la Vida sino a amarla"

Amar la Vida disuelve la Caja.

Joaquín...
... en su proceso de disolución, gracias. 
 

 

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